Balanza comercial del sector químico muestra déficit de US$ 15.500 millones hasta abril
El déficit del país en la balanza comercial de productos químicos llegó a US$ 15,5 mil millones hasta abril. Esto representa una disminución de 10,3% frente al mismo período de 2022. El monto alcanzó los US$ 61,2 mil millones en los últimos 12 meses, con una reducción de US$ 1,8 mil millones frente al récord de US$ 63 mil millones en 2022. Los datos son de la Asociación Brasileña de la Industria Química (Abiquim).
Para la directora de Economía y Estadística de la Abiquim, Fátima Giovanna Coviello Ferreira, es importante contar con una política de Estado de largo plazo que aborde los desafíos estructurales de la competitividad y que posibilite atraer inversiones productivas ancladas en la sostenibilidad. También refuerza la necesidad de acciones inmediatas y de alto impacto en términos de política comercial en el contexto del empeoramiento del escenario económico.
“Seguimos defendiendo una agenda estructurante e innovadora, con un proyecto de desarrollo industrial de mediano y largo plazo, pero creemos que es indispensable y urgente una política comercial pragmática que priorice la reanudación inmediata de los niveles regulares de aranceles, y que combata sistemáticamente los picos de importación. mediante el restablecimiento de un ambiente de negocios seguro y leal que trae beneficios para todos los brasileños”, evalúa.
Las importaciones de productos químicos tuvieron un retroceso del 6,6% respecto al mismo período del año anterior. En los primeros cuatro meses del año, el sector movió prácticamente 16 millones de toneladas. Los números se concentraron en la retracción de adquisiciones del 7,9% en productos inorgánicos y del 10,1% en productos orgánicos, los grupos más representativos en términos de cantidades adquiridas.
Sin embargo, en los primeros cuatro meses de 2023 hubo aumentos significativos en los volúmenes importados de resinas termoplásticas (29,9 %), fibras sintéticas (16,1 %) y aditivos para uso industrial (2,4 %), comprados en gran parte de Asia a precios significativamente inferiores a los practicado en el mismo período del año anterior.
Según el director de la Abiquim, este hecho es de gran preocupación, ya que estos picos de importación se dan en grupos estratégicos de productos químicos, materializando daños en la balanza comercial, resultantes de la aceleración del deterioro de las condiciones de competitividad. Ese hecho también se verifica en el aumento del grado de ociosidad en el uso de la capacidad instalada de las centrales nacionales, puntualiza el mandatario.
En términos monetarios, hasta abril, hubo una disminución de 10,1% en el valor importado (de US$ 22,8 mil millones a US$ 20,5 mil millones), con productos para la agroindustria (fertilizantes y sus intermediarios – US$ 4,8 mil millones; y plaguicidas agrícolas – US$ 1 700 millones) y farmacéuticos (US$ 5 800 millones) representaron el 59,7% de la canasta importadora. Mensualmente, las importaciones se estabilizó en US$ 5 mil millones y las exportaciones en US$ 1,1 mil millones.
La industria química y la situación fiscal
La industria química brasileña tiene un régimen fiscal diferenciado, el Régimen Especial de la Industria Química (Reiq). Fue creada con el objetivo de equilibrar la competitividad del sector químico brasileño. El presidente del Frente Parlamentario Mixto para la Competitividad de la Cadena Productiva del Sector de Química, Petroquímica, Plásticos y Química Fina, diputado Afonso Motta (PDT-RS), dice que mantener el Reiq es importante para que el sector pueda tener más condiciones para competir con el mercado.
“La industria química brasileña no puede competir con la industria química mundial, no solo en lo que respecta a este tema Reiq, sino también en lo que respecta a la competitividad, mostrando la diferencia entre la industria brasileña y la industria mundial. Por eso, seguiremos trabajando para asegurar la puesta en valor de un sector responsable de más de 2 millones de empleos directos e indirectos en nuestro país, con una facturación de más de US$ 200 mil millones anuales”, enfatiza.
En 2022, el Congreso Nacional revocó el veto que revocaba el mantenimiento del Régimen Especial de la Industria Química (Reiq) hasta 2027. Con el derrocamiento del veto, se restableció el texto, que ya había sido aprobado por el Congreso, y el sector tendrá un régimen de reducción gradual.
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Por Brasil 61
