BC eleva pronóstico de crecimiento económico de 1% a 1,2%
“La revisión moderada refleja, en particular, sorpresas positivas en algunos componentes del sector servicios en el cuarto trimestre de 2022 − dejando una carga estadística para el sector para 2023 ligeramente superior a la esperada previamente −, mejores previsiones para la industria extractiva y la primera indicadores del primer bimestre de 2023”, explicó el BC, que también espera un “aporte relevante” del sector agropecuario en el crecimiento del año.
En 2022, la economía brasileña creció un 2,9 %, tras un aumento del 5 % en 2021 y una disminución del 3,3 % en 2020. El sector servicios fue el que más contribuyó al crecimiento del PIB el año pasado. Según el BC, los sectores del sector se vieron severamente afectados por la pandemia del covid-19, inicialmente, pero desde entonces han mostrado firmes sendas de crecimiento. Para 2023, la proyección para el sector servicios tuvo un ligero aumento, de 0,9% a 1%.
En la industria, la previsión pasó de la estabilidad a un aumento del 0,3%, con un empeoramiento de la estimación para la construcción y una mejora para el resto de actividades. En el caso de la industria extractiva, el BC estima un aumento de 2,3% en el segmento, frente a una proyección de 1,5% en el informe anterior, ante “pronósticos favorables para la producción petrolera”.
“Respecto a la trayectoria trimestral esperada, se esperan variaciones modestas a lo largo del año para la industria, los servicios y el consumo interno. La agricultura, sin embargo, deberá presentar una dinámica diferente, con un crecimiento significativo en el primer trimestre, principalmente por la expectativa de un alto incremento en la producción de soja. Este comportamiento esperado para la agricultura debería contribuir a un aumento del PIB en el primer trimestre y a una desaceleración en el trimestre siguiente”, dice el informe.
La proyección de crecimiento para la agricultura se mantuvo en 7%, luego de una caída de 1,7% en 2022, reflejando pronósticos favorables para cultivos con alta participación en el sector, como café, maíz y soja.
En cuanto a los componentes internos de la demanda, hubo revisiones de moderada magnitud en las proyecciones: aumento del consumo de los hogares, de 1,2% a 1,5%, y reducciones en la formación bruta de capital fijo (inversiones) para empresas, de 0,3% a cero y para consumo del gobierno, de 1,1% a 0,7%. Las exportaciones e importaciones de bienes y servicios, en 2023, deberían variar, en ese orden, 2,4% y una caída de 0,5%, frente a las respectivas proyecciones de 2,8% y 0,7% del Informe sobre Inflación anterior.
“El aumento en la proyección del consumo privado también se deriva de un pronóstico ligeramente más favorable para la renta disponible de los hogares, por la evolución mejor a la esperada de la renta laboral media en el segundo semestre de 2022, y el nuevo aumento del salario valor mínimo, que afecta los ingresos del trabajo y las prestaciones asistenciales y de la seguridad social”, dice el BC.
endurecimiento monetario
Según el documento, la proyección sigue reflejando un escenario prospectivo de desaceleración de la actividad económica este año, en comparación con lo observado en los dos años anteriores. “Dicha desaceleración está influenciada por la disminución del ritmo de crecimiento global y por los impactos acumulativos de la política monetaria interna (alta tasa de interés básica)”, explicó el BC.
La tasa se mantiene en el nivel más alto desde enero de 2017, cuando también estaba en 13,75% anual. En la reunión de este mes, fue la quinta vez consecutiva que el Banco Central no modificó la tasa, que se mantiene en este nivel desde agosto del año pasado. Previamente, el Copom subió 12 veces seguidas la tasa Selic, en un ciclo que se inició en medio de alzas en los precios de alimentos, energía y combustibles.
La Selic es el principal instrumento que utiliza el Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central para alcanzar la meta de inflación porque la tasa afecta los precios, ya que mayores tasas de interés encarecen el crédito y estimulan el ahorro, evitando que se caliente la demanda.
Crédito
De acuerdo con el Informe sobre la Inflación, una desaceleración del crédito interno mayor a la compatible con la etapa actual del ciclo de política monetaria es un riesgo a la baja para la actividad económica. Según BC, en Estadísticas publicado ayer (29), el mantenimiento de altas tasas de interés, resultado del endurecimiento monetario, y la propia desaceleración de la economía desde la segunda mitad del año pasado, contribuyeron a la desaceleración del crédito bancario. Apenas el mes pasado, las concesiones de crédito cayeron un 10,5% para personas físicas y un 8,1% para empresas.
“Los datos disponibles hasta el momento sugieren que el proceso de desaceleración del crédito a las empresas, que se da bajo la influencia de los impactos acumulativos de la política monetaria, se vio afectado en limitada magnitud por eventos puntuales relacionados con las grandes empresas”, dice el informe.
Política Fiscal
Adicionalmente, el BC menciona la “incertidumbre sobre el rumbo de la política fiscal”. Este jueves, el Ministerio de Hacienda presenta el nuevo marco, que reemplazará el techo de gasto, aprobado en 2016. “La propuesta de un nuevo marco fiscal debe traer mayor claridad sobre la sostenibilidad de la deuda pública, con repercusiones en las expectativas de inflación, riesgo primas e, indirectamente, sobre la actividad económica”, destaca el documento.
em Minutas de Copomdado a conocer esta semana, el BC reforzó que “un marco fiscal sólido y creíble” puede ayudar en el proceso de desinflación.
Inflación
Según el BC, la inflación, calculada por el Índice Nacional de Precios al Consumidor Ampliado (IPCA), debe terminar 2023 en 5,8%, en el escenario con tasa de interés básica en 12,75% anual y tipo de cambio de R$ 5,25. En el informe anterioren diciembre, la proyección era del 5%.
La agencia también proyecta que la inflación sea de 3,6% en 2024 y 3,2% en 2025. En esta trayectoria, la tasa Selic llega a fines de 2024 y 2025 en 10% y 9% anual, respectivamente.
El informe destaca que la probabilidad de que la inflación oficial supere el techo objetivo en 2023 aumentó del 57% en el informe de diciembre al 83% ahora en marzo.
La meta para 2023, definida por el Consejo Monetario Nacional (CMN), es de 3,25% de inflación, con un intervalo de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales hacia arriba o hacia abajo. Es decir, el límite inferior es 1,75% y el límite superior 4,75%. Para 2024 y 2025, el CMN estableció una meta de 3% para el IPCA, en ambos años, también con una tolerancia de 1,5 punto porcentual.
Según el informe, la inflación de 12 meses siguió cayendo desde el informe anterior. Sin embargo, la inflación al consumidor aumentó 0,42 puntos porcentuales en el trimestre finalizado en febrero, manteniéndose “por encima del rango compatible con el cumplimiento de la meta de inflación”.
Por ello, el Copom no descarta la posibilidad de volver a subir la tasa Selic, en caso de que el proceso de desinflación no resulte como se esperaba.
Foto de © Marcello Casal jr/Agência Brasil