Déficit de almacenamiento llega a 118,5 millones de toneladas en Brasil

El déficit de almacenamiento previsto para la cosecha de cereales 2022/2023 debería ser de 118,5 millones de toneladas. Esta información fue suministrada por el presidente de la Cámara Sectorial de Equipos para Almacenamiento de Granos de la Asociación Brasileña de la Industria de Máquinas y Equipos (Abimaq), Paulo Bertolini. El problema puede traer perjuicios a los productores rurales.

La capacidad estática de almacenamiento de granos es de 194 millones de toneladas, mientras que la producción esperada para Brasil es de 312,5 millones de toneladas de granos, y esta diferencia puede causar pérdidas al provocar una disminución en los precios de las materias primas, como explica Bertolini.

“El productor también es presionado para que se deshaga, entre comillas, de su producción, porque no tiene donde secar, limpiar y almacenar el grano. Y luego entra en este mercado ofreciendo un producto _ y obliga a bajar los precios muy intensamente. Entonces parte de la caída de los precios de los commodities hoy se debe a la falta de infraestructura y principalmente a la falta de almacenes”, contextualiza.

Según el especialista, la tendencia de la agricultura es seguir creciendo, y esto debe ir acompañado de infraestructura. Este déficit de almacenamiento se acumula a lo largo de los años, ya que la capacidad de almacenamiento crece en un promedio de 4,8 millones de toneladas, por debajo del ritmo de crecimiento de la producción de granos, que avanza en torno a los 9,4 millones de toneladas.

“Necesitamos invertir por lo menos R$ 15 mil millones de reales cada año en nuevos silos, esto es solo para seguir el ritmo de crecimiento de la agricultura de granos en Brasil, ni siquiera para reducir el déficit” — estimó el presidente de la Sectorial Cámara de Equipamientos para Almacenamiento de Granos Abimaq, Paulo Bertolini.

Otro tema planteado por el experto es dónde se deben construir estos silos. Según Bertolini, lo ideal es que el almacenamiento esté lo más cerca posible de la producción. “Aquí en Brasil solo tenemos el 15% de nuestra capacidad estática que está dentro de las fincas, es muy poco. Y esto genera desperdicio, daño, pérdida de ingresos, destrucción de la vía, porque concentra todo el movimiento de transporte en el pico de la cosecha y no cadenciado durante todo el año, si había un almacén, hay una pérdida general para todos” — reflexionó.