Sangrado causado por la inflación

La inflación en palabras más simples significa la alteración, aumento en el valor de un determinado bien o servicio en un corto o mediano plazo. Palabra que más molesta a todos, sobre todo ahora en la fase actual, es un villano en el mundo, incomprendido por todos, pero pocos logran domarlo, dado el ejemplo del materias primas que marcó la pauta para todos los aumentos inflacionarios que tenemos.

El equilibrio entre países consumidores y países productores debe existir y es fundamental. Esto evita la escasez y la volatilidad de los precios, evitando fluctuaciones de precios y un desequilibrio inflacionario.

Tenemos algunos mecanismos que pueden determinar este freno en la sangría de precios y servicios, pero con la presión de compras puede dificultar este retroceso de precios.

Como ejemplo reciente, experimentamos precios altos para varios productos/commodities durante la pandemia, dejando todos los precios fuera de control.

Estas subidas de precios favorecieron mucho los intereses de los exportadores, mucho con la valorización de sus productos, elevando también los precios internos, sacrificando a la población y contribuyendo al aumento de la inflación.

En Brasil y en todo el mundo, los Bancos Centrales ingresan al mercado de tasas de interés cada vez que la inflación se sale de control, elevando las tasas de interés para desalentar mayores aumentos.

Aun sabiendo que las fuerzas de aumento de precios son internacionales y están presionadas por grandes países consumidores, provenientes principalmente de países populosos como China, India, Japón, entre otros.

Existen varios índices de inflación que son medidos y monitoreados por el Banco Central:
IPC (Índice de Precios al Consumidor); IPCA (Índice de Precios al Consumidor Ampliado); INPC (Índice Nacional de Precios al Consumidor); IPA (Índice de Precios al Productor Ampliado); INCC (Índice Nacional de Precios de la Construcción Civil); IGP (Índice General de Precios); IPC-Fipe (Índice de Precios al Consumidor de la Fundación Instituto de Investigaciones Económicas); IGP-M (Índice General de Precios de Mercado).

Entonces, en el punto álgido de estos máximos inflacionarios, necesitamos contar con la colaboración de los gobiernos, el mercado, los empresarios y la población para que podamos tener un equilibrio en los precios, es decir, todos tienen que colaborar, esto beneficiará a todos.